Las puertas automáticas han ganado gran popularidad en los últimos tiempos por su capacidad para facilitar el acceso y mejorar la eficiencia en diversos entornos, desde comercios hasta hogares. Estas soluciones no solo incrementan la comodidad de quienes las usan, sino que también proporcionan un alto grado de seguridad. A medida que las tecnologías avanzan, la integración de sistemas de protección se hace esencial para asegurar tanto el correcto desempeño como la seguridad de los usuarios.
Es fundamental conocer las prácticas adecuadas para fortalecer la seguridad de las puertas automáticas, con el fin de reducir riesgos y evitar accidentes. Para que todo te sea más fácil, te mostramos las principales medidas de seguridad que se deben tener en cuenta.
Puertas de calidad
Lo primero que hay que mirar es que la puerta tenga todas las medidas de seguridad y en consecuencia sea una puerta de calidad. En Metalblinds.es no solo podrás encontrar las mejores puertas, sino también los mejores automatismos para puertas correderas para que la instalación sea de calidad y lo más segura posible.
Hay que prestar atención a todos los detalles para que todo funcione bien y por ese motivo siempre recomendamos contratar los servicios de profesionales como los de Metalblinds. Con ellos siempre podrás tener la seguridad de que el resultado será el esperado.
Barreras de seguridad
Para asegurar el buen funcionamiento y la seguridad de las puertas automáticas, es esencial incorporar dispositivos de protección en la parte inferior. Estas barreras son fundamentales para evitar el riesgo de aplastamientos, tanto de personas como de objetos, cuando la puerta se cierra. Resultan especialmente necesarias en entornos industriales o áreas con alto tránsito de vehículos y peatones.
Los sistemas de seguridad instalados en estas barreras son capaces de detectar cualquier tipo de presión o contacto, lo que activa un mecanismo que obliga a la puerta a reabrirse de inmediato, previniendo accidentes. Aunque cumplen funciones similares a los sensores de seguridad, su acción se basa en la detección física del contacto.
Es igualmente relevante que las puertas estén equipadas con un mecanismo de deslizamiento controlado. Este sistema asegura que el cierre no sea brusco, sino progresivo y suave. De esta manera, se evita la generación de impactos repentinos que podrían resultar en daños o accidentes. El empleo de un sistema de amortiguación es clave en este proceso, proporcionando un movimiento sin interrupciones y reduciendo el riesgo de lesiones en el cierre de la puerta.
Sensores de seguridad

Los dispositivos de seguridad instalados en las puertas automáticas son fundamentales para evitar incidentes. Estos sensores detectan objetos o personas en el trayecto de la puerta y detienen su movimiento antes de que se genere algún daño. Esto es crucial para preservar la seguridad en áreas de alto tráfico o espacios reducidos.
Uno de los sensores más utilizados son las fotocélulas, que funcionan a través de un haz de luz infrarrojo. Si dicho haz es interrumpido mientras la puerta se cierra, el sensor envía una señal de alerta para detener el cierre. Esta tecnología es especialmente útil en entornos con un flujo constante de personas o vehículos, asegurando que la puerta no provoque un accidente.
La correcta instalación y el adecuado mantenimiento de estos dispositivos son fundamentales para su eficacia. Si los sensores no funcionan correctamente, pueden generar situaciones peligrosas, como el riesgo de que personas u objetos queden atrapados. Por este motivo, es necesario realizar revisiones periódicas y contar con técnicos especializados para garantizar el correcto funcionamiento de estos sistemas de seguridad.
El mantenimiento es fundamental
El mantenimiento regular de las puertas automáticas es fundamental para asegurar su correcto funcionamiento y seguridad con el paso del tiempo. Estos sistemas, compuestos por varios componentes mecánicos y electrónicos, requieren una inspección constante para verificar que elementos como los motores, los sensores, los mecanismos de apertura y los dispositivos de seguridad se encuentren en buen estado.
Las revisiones frecuentes permiten identificar posibles desgastes en las partes móviles, lo cual reduce la probabilidad de fallos técnicos y garantiza el rendimiento del sistema. Es esencial que las piezas móviles reciban la lubricación adecuada para prevenir fricciones que puedan afectar el funcionamiento y la seguridad del sistema.
La comprobación de los dispositivos de seguridad, como los sensores y las barreras, es crucial. Es necesario asegurarse de que estos elementos respondan correctamente a las situaciones previstas y verificar que los sistemas de apertura manual sigan funcionando adecuadamente en caso de ser requeridos.
En este sentido, confiar en expertos como los profesionales de Metalblinds para llevar a cabo el mantenimiento preventivo es una opción recomendada. Su conocimiento y experiencia en el manejo de puertas automáticas garantizan una revisión exhaustiva, lo que contribuye a evitar inconvenientes y a prolongar la vida útil del sistema.
Cumplimiento normativo
Para asegurar que las puertas automáticas brinden altos estándares de seguridad, es esencial que se adhieran a las regulaciones locales e internacionales que guían su implementación y operación. Un ejemplo de este tipo de normativa es la UNE-EN 16005, que dicta los criterios de seguridad que estos sistemas deben cumplir.
Es fundamental que la instalación de las puertas automáticas sea realizada por técnicos cualificados, quienes deben cumplir estrictamente con las normativas mencionadas. Controlar cada fase del procedimiento, desde el diseño hasta el mantenimiento, asegura que la puerta se utilice de forma segura y confiable.
Seguridad en el acceso
El sistema encargado del acceso en puertas automáticas es esencial para garantizar la seguridad. Mediante herramientas como PINs, tarjetas de acceso, lectores biométricos o aplicaciones móviles, las puertas automáticas deben implementar controles efectivos que verifiquen la identidad de quienes ingresan a un espacio.
Es vital realizar inspecciones periódicas y actualizaciones de estos mecanismos para evitar riesgos relacionados con el acceso no autorizado. El avance de la tecnología ha permitido que se utilicen métodos como el reconocimiento facial y la identificación por huella dactilar, los cuales se están adoptando en entornos con altos estándares de seguridad. Estas soluciones proporcionan una capa adicional de protección frente a posibles amenazas, asegurando que solo aquellos con autorización puedan acceder a áreas restringidas.





